Título: El fuego verde
Autor: Verónica Murguía
Editorial: Ediciones SM
ISBN: 9687791802 (ISBN13: 9789687791807)
Nº de páginas: 163
Disponible en México
Autor: Verónica Murguía
Editorial: Ediciones SM
ISBN: 9687791802 (ISBN13: 9789687791807)
Nº de páginas: 163
Disponible en México
La joven Luned anhela ir tras el rastro de los ciervos, treparse a los árboles y visitar madrigueras. Un día, gracias a un narrador de cuentos, descubre que existe un oficio misterioso: contar historias. Luned se convierte en su discípula. Así, llegan a Corberic, donde les espera una aventura.
El libro lo terminé el año pasado, pero por cuestiones navideñas, me dediqué más a leer que a reseñar. Jajaja. Por eso este libro viene tan atrasado :P
El primer libro que leí de Verónica fue “Loba”, y la verdad quedé fascinada con la historia y los detalles que envuelven a la historia y te hacen parte de ella; por lo que, estaba segura, terminaría leyendo algo más de ella.
Así, muchos me recomendaron este libro :D Pero encontrarlo en mi pueblo fue muy complicado. Simplemente los de las librerías no hacían el esfuerzo por buscar el libro ni aunque se los quisiera encargar.
Pero gracias a una gran amiga mía, que amablemente lo buscó, llegó hasta mí :3 ¡GRACIAS VIRY!
Pero vamos a la reseña…
Verónica volvió a impresionarme con su forma tan natural de escribir y de contarnos una historia fantástica cuyo camino no es igual al de muchos libros con temas similares. Si bien nos encontramos de golpe con la Edad Media, pronto nos sentimos inmersos gracias a las descripciones tan fluidas que da la autora a cerca del mundo donde ha nacido Luned. (¡Eso me encantó!)
Desde hace ya mucho tiempo que deben saber que la Edad Media es una de mis épocas favoritas… (¿o no se los había contado?)
Luned, su protagonista, fue un poco difícil de percibir, pues en un inicio parecía representar la típica inocencia de los niños que no conocen el mal, que son protegidos por sus padres, sueños e ilusiones; pero que también tienen ese aire de libertad, con ganas de comerse el mundo a su manera, sin que nadie más les diga cómo deben lucir o cómo debe actuar.
Por ello, Luned es una chica difícil de ignorar y fácil de querer, pues desde el principio nos muestra su vivacidad y sus ganas de conservar la justicia que debería ser parte innata en el ser humano. De hecho, nos la contagia; al menos a mí me la contagió. Fue como ver un mundo muy positivo desde sus ojos.
Pero con forme el libro avanza, somos testigos de los cambios sentimentales y psicológicos que sufre gracias al cambio en su entorno, y gracias a las nuevas personas que conoce y situaciones que debe enfrentar.
Por la sinopsis pensaríamos que se trata de un libro donde la protagonista se pasará el día escuchando y relatando historias; pero no, y pienso que la autora quiso dar a entender algo más allá que solo cuentos fantásticos.
Se trata, al menos desde mi punto de vista, del contraste entre los duros golpes que da la vida y al cara que le ponemos. En el caso de Luned, cuya inocencia la envuelve completamente, poco a poco pone diferentes caras a los problemas y dolores que se le presentan, por lo que vemos una evolución en el personaje.
Cada lector puede interpretar de diferente manera una historia, y para mi esta fue como ver a la inocencia ser consumida poco a poco; pero también ver como se gana fortaleza por las dificultades que hay que enfrentar conforme crecemos. Además de que nosotros le damos los propios finales y rumbos a nuestras historias.
No es solo una historia que nos entretiene, es una historia que nos mete en la piel del personaje principal, nos invita a vivir su vida con sonrisas y tristezas incluidas, y a evolucionar con ella; además de que, por supuesto, nos deja un gran mensaje al final de la historia donde, a pesar de todo, de la risa y la tristeza, cada uno escribe su propia historia y le da el camino y el final que desea.
Pensó en su padre, en sus delgadas manos encallecidas y en los ojos, ya cercados de finas arrugas, de su madre. [...] Recordó la promesa hecha a su abuela […] Y deseo verla una vez más. Fue como despertar.
Conclusión
Así pues, es un libro corto, pero lo recomiendo mucho; sobre todo para las personas que les gustan las pequeñas aventuras, pero que también quieren disfrutan de una pequeña moraleja acerca de la madurez que creamos por el mundo en el que vivimos.
*Gracias a Viry por el libro :)
¡Gracias a todos por leerme! :D
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